Comunidad es un grupo que desde 1987 explora la fusión de la música boliviana con las músicas modernas. Este 6 de julio presentará su décimo álbum, Cactus, en el Teatro Muncipal de Cámara de La Paz con una nueva formación ya consolidada. La Trini conversó con Jaime Cortez.
- Cuéntennos un poco del camino de la banda en estos últimos años.
- La nueva conformación de Comunidad viene trabajando desde 2015, con Edwin Centellas Mariaca, Marcelo Palacios Pabón y Jaime A. Cortez Maldonado. Se continúa con la filosofía que apuesta por un arte libre y con apoyo mutuo; no obstante, pese a esas características, producimos, ¡qué tiempos aquellos! Empezamos con tres temas, dos de los Jairas, “Gringo bandolero” y “Refranes”, y el clásico “Alfonsina y el mar”, un claro homenaje en gratitud a nuestras influencias de juventud.
Posteriormente, ya consolidados, producimos nuestro octavo disco Ojos locos que fue una mirada amplia de conceptos tanto musicales como poéticos, una reflexión sonora sobre lo que se estaba viviendo en esos momentos. Y, consecuentemente, con la energía ya desplegada en esa línea, nació Cactus.
- ¿Cuál es la propuesta del nuevo disco Cactus?
- Nuestro nuevo disco, en formato CD, es un viaje de ocho canciones sugerentes al encuentro del ser, en las que describimos un camino marcado por el rito, el vuelo, la conexión, el retorno, el amor, la oscuridad, la inquietud, el fuego, los sueños, la pasión, el destino y la libertad.
Rítmicamente, tiene influencias diversas de estas latitudes, con la particular fusión de Comunidad, en la que los instrumentos no son un timbre o adorno. Las melodías nacen de un espacio enigmático ya que el entablar nuevos lenguajes refuerza nuestras relaciones: no solo vivimos el proceso de la composición, sino que nos divertimos enormemente al sentir estas nuevas sensaciones y su fuerza particular. Cactus es un espejo actual, no podemos puntualizar dónde empieza este proceso creativo y mágico, simplemente disfrutamos del viaje.
- ¿Qué están preparando para el concierto del 6 de julio en La Paz?
- Un viaje con la nueva mirada de Comunidad, interrelacionado con los temas clásicos de la banda en estos 36 años de propuesta de creación y magia.
- Con estos años en el camino de la música. ¿Cómo ven el género fusión, el acercamiento entre la música tradicional boliviana y el rock y otras músicas modernas?
- La música tradicional boliviana, siempre estará ahí. Al margen de miradas, políticas y exigencias para “salvaguardar la pureza”, la fusión, a tono con la realidad, refleja nuevas decisiones y caminos; esos caminos por los que muchos supieron mirar más allá y descubrir lo que acababa de suceder. La sensibilidad, la nueva energía contemporánea y la manera de abordar los sentimientos revelan que las cosas están cambiando. Lo que habla de la nueva dimensión de la música urbana.
La línea roja de la fusión se ha vuelto a traspasar, sacudiendo las telarañas y conectando con una nueva generación, como ya ocurriera en tiempos anteriores con el rock, el pop y otros géneros modernos. Seguro que, una vez abierta la caja de Pandora, escucharemos nuevas propuestas, nuevos experimentos, nuevas realidades.
- ¿Cuáles son los planes a futuro con Comunidad?
- Comunidad tiene la mirada para recorrer el mundo, hacer un alto en la composición y dedicarnos más a la difusión de nuestra música, a través de la participación en diferentes festivales y conciertos.