Rolando Encinas, director de la orquesta Música de Maestros, rememora el carnaval paceño de antaño y reflexiona sobre la vigencia de la fiesta en la que ahora destaca la inclusión de nuevas músicas y la convivencia de tradiciones rurales y citadinas.
- ¿Cuáles son las principales tradiciones del carnaval de antaño?
- Si bien es una fiesta que llegó con la conquista como a muchos departamentos del país, en La Paz tiene características propias, de las cuales aún se mantienen dos formas de festejar: la del campo y la de la ciudad.
La fiesta de la Anata en el área rural, que arranca ya en noviembre porque responde a un ciclo de florecimiento y cosecha de productos agrícolas, se caracteriza por la presencia de los instrumentos de pico: tarkas, moseños, pinkillos y por la danza del chuta, originaria de los pueblos de Caquiaviri y Corocoro. El festejo principal del Chuta se da una semana después del carnaval.
En la ciudad, el carnaval tenía otra connotación. Se organizaban fiestas amenizadas por conjuntos, estudiantinas y orquestas típicas, costumbre que aún se ha mantenido en el tiempo. También se debe mencionar al juego con agua, y el baile de comparsas acompañadas de bandas, que desencadenaban en fiestas de mascaritas. El personaje más importante es el pepino, que surge de la influencia del arlequín y el pierrot de la farándula veneciana, según datos y fotografías que se remontan hasta 1909.
Desde 1991, Música de Maestros dio un nuevo impulso a la recuperación que se había perdido por un par de décadas, en los gobiernos de dictadura. Recuperamos las retretas, las fiestas de antaño, las vestimentas, y ahora ya son frecuentes las fiestas de antaño en diferentes espacios particulares y otras organizadas por la alcaldía.
- ¿Qué estilos musicales son parte de esa tradición?
- En el área rural, las moseñadas de Walata Grande, los pinkillos de la región del lago Titicaca y las tarcas; en las ciudades las bandas y estudiantinas. El repertorio musical siempre ha sido de acuerdo a la época. En las fiestas de la ciudad se empezaba con un paso doble, valses, tangos, taquiraris y huayños. En esta última época entraron muchos géneros como las morenadas, caporales y otros.
- ¿Qué cambió y qué se mantuvo respecto a estas tradiciones?
- La inclusión de música del interior del país, por ejemplo, del Chaco, de Potosí que gusta a los paceños. La Paz es una ciudad donde radica gente de diferentes regiones. Entre las costumbres, se mantiene la tradición del martes de challa, el pepino tradicional que identifica a nuestra ciudad. En el tema gastronómico, el puchero, un plato muy tradicional de esta fecha.
- ¿Qué eventos tuvo Música de Maestros en este carnaval y qué más se prevé para el resto del año?
- Iniciamos el año preparando el carnaval con nuestra comparsa de pepinos verdes y rojos, los colores de la bandera de La Paz. Realizamos una fiesta pública y gratuita, con un gran éxito. El domingo 26 de febrero despediremos el carnaval en la retreta organizada por la Secretaría de Culturas, con lo mejor de nuestro repertorio, que aporta a la recuperación del carnaval de antaño en La Paz desde hace 30 años.
En mayo, por el Día de la Madre, tenemos agendadas dos presentaciones en el Teatro Nuna. En julio nos espera el escenario del Teatro Municipal “Alberto Saavedra Pérez”, concierto para el cual estamos preparando un repertorio variado de obras de un selecto grupo de autores y compositores nuestros, entre ellos, el notable chuquisaqueño Simeón Roncal.
Y a lo largo del año, conciertos en diferentes lugares y la posibilidad de poder llevar nuestra música al público del interior del país.